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lunes, 17 de octubre de 2011

Temor que destruye

HIJA, alma amadísima, la experiencia debería de haberte hecho comprender ya que el temor te destruye, ¿cuántas veces has venido a MI, llorando, temblando de miedo porque has perdido algo o temer perder algo?; y la experiencia debería de darte ya la capacidad de comprender que si eres dócil a mi gracia todo se te va a ir solucionando poco a poco. HAY dos fuerzas tremendas en el alma humana, el TEMOR y la FE, pero la FE es muchísimo más fuerte, pero ¿cómo andas, alma amadísima, en tu FE? Me dices que esuchas rumores por doquier y que te hacen perder la paz, la serenidad en tu vida, alma amadísima; no culpes a las personas de lo que sucede, no te dejes destruir por el temor, solamente VE que de MI depende que tú estés en paz y serenidad profunda, si confías en MI, si en verdad has comprobado ya que todo te lo puedo DAR y que a medida que pasa el tiempo captes que sólo necesito de ti un abandono total a lo que va sucediendo, porque todo lo tengo planeado para tu bien, para que te des cuenta de que sin MI todo es perder la paz, no es posible que vivas sólo para las cosas materiales; comprende que cada día debes de tener un tiempo para orar, para destruir el temor que puedes tener en el alma; CAMBIAR tu mente de estarte sintiendo débil y frágil, a sentirte fuerte porque me tienes a MI, que soy quien puede darte aumento de FE, fortaleza y alegría sobrenatural, pero tienes que empezar por aprender a vivir con sencillez, sin complicaciones y sin temores.
El temor te destruye, te va haciendo perder fuerza, te está haciendo frágil, porque tienes miedo de perder lo mucho o poco material que tienes; es necesario que captes que necesitas en verdad soltarte de la rama en que estás prendida, la rama de lo seguro, según tú, para sotenerte de lo único seguro que SOY YO tu amigo, tu padre. Ven a MI.

Fuente: Cristo y yo
Anamaría Rabatté Cervi
Vigésimosegunda Edición
Tipografías Editoriales

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